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China es el país más afectado por el brote del coronavirus, y por lo tanto, el sector tecnológico también, pues más del 70% de los componentes de hardware de consumo como smartphones, relojes inteligentes, televisores, etc. se fabrican en este país. De hecho, muchos de éstos en la provincia de Wuhan, desde dónde comenzó a esparcirse el virus y en donde, hasta hoy, se mantienen las fábricas al 50% de su capacidad.
Esto, más el hecho de que los usuarios difícilmente renovarán sus equipos en estos tiempos donde en varios países hay contingencia y no pueden salir de sus casas, provocará impactos negativos en el sector tecnológico alrededor del mundo. Sin embargo, de acuerdo a proyecciones generadas por diferentes consultoras, las consolas de videojuegos se perfilan para ser las menos afectadas.
Se estima que en esta primer mitad del año la fabricación de hardware de consumo tenga una disminución en su fabricación y ventas, los smartphones tendrán una contracción del 16%, mientras que las consolas de videojuegos caerán 10.1%, según datos de TrendForce, a nivel global y actualizados hasta febrero de 2020, que ya toman en cuenta los impactos de la crisis sanitaria.
De acuerdo con Rodrigo Rubio, director de Bain & Company en México, lo que ayudará principalmente a los videojuegos es su modelo de descarga digital de juegos, la cual tendrá una sólida demanda.
“Esto te habla de un sector con una demanda y oferta sólida además de un modelo de venta muy ágil para que la gente acceda a ellos. Si tienes todo en línea, tienes un modelo maduro para consumidor y en el caso de los videojuegos es así”, dijo Rubio
Un buen ejemplo de lo anterior es el más reciente lanzamiento de Nintendo, Animal Crossing: New Horizons, el cual registró ventas 3.5 veces más altas que su edición pasada de 2013; registrando nuevos récords en ventas la última semana en Reino Unido y en Japón.
