imagen tomada de as.com
El estudio detrás de MindsEye no sale de una para meterse en otra. Tras su accidentado lanzamiento, Build a Rocket Boy vuelve a estar en el ojo del huracán.
Casi un centenar de empleados han denunciado públicamente las condiciones de trabajo dentro de la empresa y emprendido acciones legales contra la dirección.
En una carta abierta firmada por 93 trabajadores y publicada por el sindicato Independent Workers of Great Britain (IWGB), los desarrolladores acusan al estudio, fundado por Leslie Benzies (ex presidente de Rockstar North), de mantener un ambiente de “faltas de respeto y malos tratos prolongados” hacia su personal.
Los firmantes señalan que los problemas no se limitan a un mal lanzamiento.
En los meses previos al estreno de MindsEye, la dirección impuso una jornada obligatoria de ocho horas extra semanales, ignorando las advertencias del equipo. Esto habría provocado una crisis de salud física y mental entre los empleados.
“Build a Rocket Boy ha mostrado poco respeto por el bienestar de su personal. Muchos desarrolladores brillantes se han sentido utilizados y descartados”, denunció el ingeniero de sonido Isaac Hudd.
Por su parte, el exdiseñador Ben Newbon afirmó que la empresa atravesó “meses de crunch que provocaron enfermedades mentales y físicas graves”.
La carta exige a los directivos dar un paso atrás y dejar que los creativos que aún permanecen en el estudio “tracen el camino a seguir”.
También piden una disculpa pública, mejores condiciones en los despidos y que cualquier futura reducción de personal sea gestionada por asesores independientes.
El sindicato IWGB confirmó que ya se han iniciado acciones legales por la mala gestión de los despidos, que afectaron a más de 100 trabajadores tras el fracaso comercial del juego.
Un debut para el olvido
MindsEye, que llegó el 10 de junio a PS5, Xbox Series X/S y PC, fue recibido con duras críticas por su pobre rendimiento y una avalancha de errores técnicos.
Actualmente, tiene una calificación media de 37 puntos en Metacritic, colocándolo entre los peores lanzamientos del año.
Hasta ahora, Build a Rocket Boy no ha emitido ningún comunicado oficial sobre las denuncias ni sobre las medidas legales en curso. Pero todo apunta a que la historia de MindsEye está lejos de tener un final feliz.
Con información de Hobbyconsolas.
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